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viernes, 30 de octubre de 2009

Así trabajan los gobiernos de izquierda: Evo comienza la industrialización del litio boliviano


Rosa Rojas, corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 30 de octubre de 2009, p. 31

La Paz, 29 de octubre. "Bolivia ha comenzado la industrialización del litio", aseveró este jueves el presidente Evo Morales al recibir los primeros kilos de carbonato de litio, de cloruro de potasio y de ácido bórico producidos por técnicos bolivianos con fórmulas desarrolladas mediante investigación nacional, en una planta piloto que está en construcción en el salar de Uyuni con inversión ciento por ciento estatal.

El ministro de Minería, Luis Alberto Echazú, entregó el material al gobernante en unos cilindros de vidrio durante un acto ante decenas de habitantes de las comunidades aledañas al salar, un blanco espejo de 10 mil kilómetros de diámetro que, aseveró el gobernante, junto con el de Coipasa y otros menores, "alberga unos 100 millones de toneladas del mineral".

"La producción industrial se iniciará en 2013 con una inversión de 350 millones de dólares", dijo el mandatario en la planta piloto, que queda a orillas del salar de Uyuni, el más grande del mundo y donde se supone está 50 por ciento de las reservas mundiales de litio.

Según el mandatario, a partir de esa fecha Bolivia puede aspirar a tener ingresos por mil millones de dólares anuales por el litio, elemento que, entre otras aplicaciones, sirve para fabricar baterías.

Chile, el competidor con las reservas de Atacama

El mandatario indígena resaltó que "Bolivia tiene como competidor a Chile con el salar de Atacama", donde también hay riquezas en litio.

En cuanto al litio "no se debe repetir el saqueo de la riqueza de Potosí (mina de plata), donde los explotadores se llevaron todo y no dejaron nada para Bolivia", dijo Morales Ayma respecto del cerro que dio ingentes ganancias, especialmente durante la colonia, que se quedaron en manos de explotadores, quedando para los pueblos mineros sólo pobreza y contaminación.

Informó que el próximo paso será el establecimiento de una planta que producirá 30 mil toneladas por año de carbonato de litio, "con una facturación anual para el Estado boliviano de 150 millones de dólares".

Se espera producir además 800 mil toneladas por año de cloruro y sulfato de potasio, con una facturación anual de 320 millones de dólares; 20 mil toneladas de ácido bórico con facturación anual estimada de 12 millones de dólares y cloruro de magnesio.

Morales resaltó que ya se desarrolla el proyecto financiero para la inversión ciento por ciento estatal, con fondos propios, préstamos de países amigos y ventas a futuro.

Indicó que el Estado garantizará la energía eléctrica para el complejo industrial, 30 megavatios por año, señalando que había invitado al embajador de Japón para ver cómo acelerar la inversión en geotermia en la zona de Laguna Colorada, donde se van a producir cerca de 100 megavatios anuales.

En cuanto al gas, indicó que la planta industrializadora requerirá de 600 millones de metros cúbicos por año, lo que va a requerir "hacer gasoductos para industrialización de litio y que las comunidades tengan gas domiciliario".

El ministro de Minería, Luis Alberto Echazú, dijo durante la ceremonia que "abrir las puertas de la industrialización y llegar a mercados internacionales es el objetivo para convertir esa planta piloto en una de las más grandes del mundo en carbonato de litio".

Agregó que un comité científico que trabaja con participación de empresas extranjeras, y el Estado boliviano investiga la riqueza que se encuentra bajo el salar.

Tres empresas están interesadas en la riqueza de Uyuni: la francesa Bolloré, la japonesa Sumitomo y la coreana Kores, aunque no existen fechas para sellar los acuerdos y los montos probables de inversión.

Las primeras pruebas de carbonato de litio de Uyuni, obtenidas en laboratorio, fueron entregadas este jueves a Morales en un acto en la estatal Planta Piloto de Carbonato de Litio, en las orillas del salar.

"Este es un salto cualitativo al entregar las primeras pruebas de carbonato de litio, porque estamos empezando la primera fase de nuestro objetivo que es la industrialización", dijo a Afp el director del proyecto, Edgar Marcelo Castro.

Las primeras pruebas consisten en 10 kilogramos de carbonato de litio, que fueron entregados al mandatario en recipientes de vidrio.

La obtención del carbonato de litio, procedente de las salmueras de Uyuni, es la primera fase en la tarea de industrialización, para luego producir litio metálico y posteriormente baterías.

"La industrialización del litio no sólo es importante para Bolivia, por los recursos económicos, sino para el mundo entero, porque al ser energía limpia ayudará a paliar el problema del calentamiento global", dijo Castro recientemente a Afp.

Previamente, en esta ciudad, Morales inauguró el Foro Internacional de Ciencia y Tecnología para la Industrialización del Litio y otros Recursos Evaporíticos, al que asisten 60 científicos de 11 países del mundo como Japón, Portugal, China, Brasil y Argentina, ante quienes manifestó que Bolivia requiere socios para industrializar el mineral hasta llegar a la producción de automóviles eléctricos, pero en ningún momento perderá la propiedad del recurso.

Nota: En la foto, el presidente Evo Morales sostiene los primeros kilogramos del mineral, los cuales fueron producidos con tecnología local en una planta piloto que se construye en el salar de Uyuni. "La comercialización comenzará en 2013 con una inversión de 350 millones de dólares", dijo el mandatario. El blanco espejo de 10 mil kilómetros de diámetro alberga 50 por ciento de las reservas mundiales y el país sudamericano espera obtener mil millones de dólares anuales. El elemento es preciado para la industria automotriz, ya que sirve para baterías. También se usa en computadoras Foto Ap

sábado, 17 de octubre de 2009

Un premio Nobel para Evo Morales



Por Fidel Castro Ruz

Si a Obama se le otorgó el Premio por ganar las elecciones en una sociedad racista, a pesar de ser afroamericano, Evo lo merece por ganarlas en su país, a pesar de ser indígena, y cumplir además lo prometido.

Por primera vez en ambos países uno u otro de su etnia alcanza la Presidencia.

En más de una ocasión advertí que Obama era un hombre inteligente, educado en un sistema social y político en el cual cree. Aspira a extender los servicios de salud a casi 50 millones de norteamericanos, a sacar la economía de la profunda crisis que padece y a mejorar la imagen de Estados Unidos, deteriorada por las guerras genocidas y las torturas. No concibe, ni desea ni puede cambiar el sistema político y económico de su país.

El Premio Nobel de la Paz ha sido concedido a tres Presidentes de Estados Unidos, a un ex presidente y a un candidato a Presidente.

El primero fue Theodore Roosevelt, electo en 1901, el de los Rough Riders (jinetes duros), que desembarcó en Cuba sus jinetes, pero sin caballos, a raíz de la intervención de Estados Unidos en 1898 para impedir la independencia de nuestra Patria.

El segundo fue Thomas Woodrow Wilson, que introdujo a Estados Unidos en la primera guerra por el reparto del mundo. En el Tratado de Versalles impuso tan severas condiciones a la vencida Alemania, que sentó las bases para el nacimiento del fascismo y el estallido de la Segunda Guerra Mundial.

El tercero ha sido Barack Obama.

Carter fue el ex presidente a quien varios años después de cumplir su mandato le asignaron el Premio Nobel. Sin dudas, uno de los pocos Presidentes de ese país incapaz de ordenar el asesinato de un adversario, como hicieron otros; devolvió el Canal a Panamá, creó la Oficina de Intereses en La Habana, evitó caer en grandes déficit presupuestarios y despilfarrar el dinero en beneficio del complejo militar industrial, como hizo Reagan.

El candidato fue Al Gore, que había sido vicepresidente; el político norteamericano que más conocía sobre las terribles consecuencias del cambio climático. Más tarde, cuando lo postularon para la Presidencia, fue víctima del fraude electoral y despojado de la victoria por W. Bush.

Las opiniones sobre el otorgamiento de este Premio han estado muy divididas. Muchos parten de conceptos éticos o reflejan contradicciones evidentes en la sorpresiva decisión.

Habrían preferido ese Premio como fruto de una tarea realizada. No siempre el Premio Nobel de la Paz se entregó a personas merecedoras de esa distinción. A veces lo han recibido personas resentidas, autosuficientes, o peor aún. Lech Walesa, al conocer la noticia exclamó con desprecio: "¿Quién, Obama? Es demasiado rápido. No ha tenido tiempo para hacer nada ahora".

En nuestra prensa y en CubaDebate, compañeros honestos y revolucionarios fueron críticos. Uno de ellos señaló: "En la misma semana en que se ha concedido a Obama el Premio Nobel de la Paz, el Senado de Estados Unidos aprobó el presupuesto militar más grande de la historia: 626 mil millones de dólares." En el Noticiero de Televisión, otro periodista comentó: "¿Qué ha hecho Obama para alcanzar tal distinción?" Otros preguntaron: "¿Y la guerra de Afganistán y el incremento de los bombardeos?" Son puntos de vista basados en realidades.

Desde Roma, el cineasta Michael Moore pronunció una frase lapidaria: "Felicitaciones, presidente Obama, por el Premio Nobel de la Paz; ahora por favor, gáneselo".

Estoy seguro de que Obama estará de acuerdo con la frase de Moore. Posee suficiente inteligencia para comprender las circunstancias que rodean el caso. Sabe que ese Premio no lo ha ganado todavía. Ese día por la mañana declaró: "No tengo la impresión de que merezca estar en la compañía de tantas personalidades transformadoras que han sido homenajeadas con este Premio."

Se afirma que son cinco los integrantes del famoso comité que asigna el Premio Nobel de la Paz. Un vocero afirmó que fue por unanimidad. Cabe una pregunta, ¿consultaron o no al galardonado? ¿Puede tomarse una decisión de esa índole sin advertir antes a la persona premiada? Este no puede ser juzgado moralmente de igual forma si conocía o no previamente la asignación del Premio. Lo mismo cabe afirmar de los que decidieron asignárselo.

Tal vez sea necesario crear el Premio Nobel de la Transparencia.

Nadie ha mencionado en cambio el nombre de Evo.

Es obvio que por primera vez en la historia de Bolivia, un indio aymara de pura cepa ejerce la presidencia de ese Estado, creado por El Libertador Simón Bolívar después de la Batalla de Ayacucho, cuando el último virrey de España rindió sus armas al General Antonio José de Sucre.

Bolivia poseía entonces 2 millones 343 mil 769 kilómetros cuadrados.

Su población estaba integrada fundamentalmente por los descendientes de la civilización aymara-quechua, cuyos conocimientos en diversos campos asombran al mundo. Más de una vez se habían sublevado contra sus opresores.

Los oligarcas fratricidas y pro imperialistas de los Estados vecinos, a pesar de los vínculos comunes de sangre y cultura, le arrebataron a Bolivia 1 millón 247 mil 284 kilómetros cuadrados, más de la mitad de la superficie. Es conocido que a lo largo de los siglos, el oro, la plata y otros recursos de Bolivia eran extraídos por los privilegiados dueños de su economía. Enormes yacimientos de cobre, los mayores del mundo, y otros minerales les habían sido arrebatados después de la independencia en una de las guerras promovidas por los imperialistas británicos y yanquis.

A pesar de eso, Bolivia cuenta con importantes yacimientos de gas y petróleo y posee además las mayores reservas conocidas de litio, mineral de gran necesidad en nuestra época para el almacenamiento y uso de la energía.

Evo Morales, campesino indígena muy pobre, transitó por los parajes de Los Andes, junto a su padre, antes de cumplir seis años, pastoreando llamas de un grupo indígena. Las conducían caminando durante 15 días hasta el mercado donde las vendían para adquirir los alimentos de la comunidad. Respondiendo a una pregunta mía sobre aquella singular experiencia, Evo me contó que entonces "se hospedaba en el hotel mil estrellas", una bella forma de referirse al cielo despejado de la cordillera donde en ocasiones se ubican los telescopios.

En aquellos duros años de su infancia, la alternativa de los campesinos en la comunidad donde nació, era el corte de caña de azúcar en la provincia argentina de Jujuy, en la que a veces se refugiaba una parte de la comunidad aymara durante la zafra.

No muy lejos de La Higuera, donde el Che herido y desarmado fue asesinado el 9 de octubre de 1967, Evo, que había nacido el 26 de ese mismo mes en 1959, no había cumplido todavía 8 años. Aprendió a leer y a escribir en español, caminando hasta una escuelita pública a cinco kilómetros de la choza donde en una rústica habitación vivían sus hermanos y sus padres.

Durante su azarosa infancia, dondequiera que había un maestro, allí estaba Evo. De su raza adquirió tres principios éticos: no mentir, no robar, no ser débil.

A los 13 años su padre lo autorizó a mudarse para San Pedro de Oruro a estudiar el bachillerato. Uno de sus biógrafos cuenta que era mejor en Geografía, Historia y Filosofía que en Física y Matemáticas. Lo más importante es que Evo, para costear sus estudios, se levantaba a las dos de la madrugada a trabajar como panadero, constructor u otra actividad física. Asistía a clases por la tarde. Sus compañeros lo admiraban y ayudaban. Desde la primaria aprendió a tocar instrumentos de viento y fue trompetista de una prestigiosa banda de Oruro.

Siendo adolescente todavía, había organizado el equipo de fútbol de su comunidad, del que fue su capitán.

El acceso a la universidad no estaba a su alcance de indio aymara y pobre.

Después de su último año de bachillerato, cumplió el servicio militar y regresó a su comunidad, ubicada en la altura de la cordillera. La pobreza y los desastres naturales obligaron a su familia a emigrar hacia la zona subtropical de El Chapare, donde aquella logró obtener un pequeño lote de tierra. El padre muere en 1983 cuando él tenía 23 años. Trabajó duramente la tierra, pero era un luchador nato, organizó a todos los trabajadores, creó sindicatos y llenó con ellos vacíos que el Estado no atendía.

Las condiciones para una revolución social en Bolivia se habían ido creando en los últimos 50 años. El 9 de abril de 1952, antes del inicio de nuestra lucha armada, estalló la revolución en ese país con el Movimiento Nacionalista Revolucionario de Víctor Paz Estenssoro. Los mineros revolucionarios derrotaron a las fuerzas represivas y el MNR tomó el poder.

Los objetivos revolucionarios en Bolivia estaban lejos de cumplirse. En 1956, según personas bien informadas, el proceso comenzó a decaer. El 1º de Enero de 1959 triunfa la Revolución en Cuba. Tres años después, en enero de 1962, nuestra Patria fue expulsada de la OEA. Bolivia se abstuvo. Más tarde todos los gobiernos, con excepción de México, rompieron relaciones con Cuba.

Las divisiones del movimiento revolucionario internacional se hicieron sentir en Bolivia. Hacían falta todavía más de 40 años de bloqueo a Cuba, el neoliberalismo y sus desastrosas consecuencias, la Revolución Bolivariana en Venezuela y el ALBA; hacían falta, sobre todo, Evo y el MAS en Bolivia.

Sería largo sintetizar en unas hojas su rica historia.

Solo diré que Evo fue capaz de vencer las terribles y calumniosas campañas del imperialismo, sus golpes de Estado e injerencia en los asuntos internos, defender la soberanía de Bolivia y el derecho de su pueblo milenario al respeto de sus costumbres. "Coca no es cocaína", le espetó al más grande productor de marihuana y el mayor consumidor de drogas en el mundo, cuyo mercado ha sostenido al crimen organizado que cuesta miles de vidas al año en México. Dos de los países donde están las tropas yanquis y sus bases militares son los más grandes productores de drogas del planeta.

En la trampa mortal del comercio de drogas no caen Bolivia, Venezuela y Ecuador, países revolucionarios que, igual que Cuba, son miembros del ALBA, saben lo que pueden y deben hacer para llevar la salud, la educación y el bienestar a sus pueblos. No necesitan tropas extranjeras para combatir el narcotráfico.

Bolivia lleva adelante un programa de sueño bajo la dirección de un Presidente aymara que cuenta con el apoyo de su pueblo.

En menos de tres años erradicó el analfabetismo: 824 mil 101 bolivianos aprendieron a leer y escribir; 24 mil 699 lo hicieron además en aymara y 13 mil 599 en quechua; es el tercer país libre de analfabetismo, después de Cuba y Venezuela.

Presta atención médica gratuita a millones de personas que nunca la habían recibido; es uno de los siete países del mundo que en los últimos cinco años ha reducido más la mortalidad infantil, con posibilidad de cumplir las Metas del Milenio antes de 2015, y en una proporción similar las muertes maternas; ha operado de la vista 454 mil 161 personas, de ellas 75 mil 974 brasileños, argentinos, peruanos y paraguayos.

Un ambicioso programa social ha sido establecido en Bolivia: todos los niños de las escuelas públicas del primero a octavo grado, reciben una donación anual para sufragar el material escolar que beneficia a casi dos millones de alumnos.

Más de 700 mil personas mayores de 60 años reciben un bono equivalente a unos 342 dólares anuales.

Todas las mujeres embarazadas y niños menores de dos años reciben una ayuda de aproximadamente 257 dólares.

Bolivia, uno de los tres países más pobres del hemisferio, ha puesto bajo control del Estado los principales recursos energéticos y minerales del país, respetando y compensando cada uno de los intereses afectados. Marcha con cuidado porque no desea retroceder un paso. Sus reservas en divisas han ido creciendo. Evo dispone de no menos de tres veces más que las que disponía al inicio de su gobierno. Es de los países que mejor uso hace de la colaboración externa y defiende con firmeza el medio ambiente.

En brevísimo tiempo se ha logrado establecer el Padrón Electoral Biométrico y se han registrado aproximadamente 4,8 millones de electores, casi un millón más que el último padrón electoral, que en enero del 2009 alcanzaba 3,8 millones.

El 6 de diciembre habrá elecciones. Con seguridad el apoyo del pueblo a su Presidente se incrementará. Nada ha podido detener su creciente prestigio y popularidad.

¿Por qué no se le otorga el Premio Nobel de la Paz?

Comprendo su gran desventaja: no se trata de un Presidente de Estados Unidos.

Octubre 15 de 2009

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